C'est la vie, c'est sa vie.

"Nino, tu nunca has sido, ni serás normal"
Antonio antes de París
Cuando tenia 7 años se imaginaba su futuro siendo granjero. En los recreos se entretenia cambiando vinilos repetidos. "Mira, te cambio este de Pink Floid, por Revolver de Los Beatles". Lógicamente, jugaba solo.
A los 12 queria ser maestro o profesor. Su tiempo libre lo pasaba creando puzzles que más tarde montaria.
Rondaba los 16, y su pasión era la biología. En los patios era el chico de las fotocopias del instituto, y los 40 euros semanales los guardaba en un calcetín de rombos guardado en la funda de su flauta del cole.
Cumplió los 18 y esa misma tarde ya tenia un billete de ida a la capital francesa.
Antonino y Flavia
Como algunos dirian, la mezcla perfecta. Así eran. Ella italiana, 21 años, alta y rubia, labios gruesos. Él , nuestro hombre, madrileño, 20 años, moreno y su toque artísitico claramente congénito. ¿La cocktelera? París. Su relación fue, siguiendo la metáfora, como una perfecta noche de fiesta bajo el cielo parisino...risas, bailes, amigos, deseo, novedad, no temían a nada.
Un día, se levantaron con resaca.
Nino y ellas
Con veintiuna primaveras se creia el protagonista de la vie en rose. Ahora, por las mañanas trabajaba en una tienda de discos antiguos, por las tardes se sentaba en distintos sitios de la ciudad y pintaba, pintaba de todo. Por la noche salía, bebía, conocia y nunca dormia solo.
De Nino a Antonio

Cumplía 22 años al día siguiente. Tenia en una mano 32 trabajos en cuatro años (5 de camarero, 7 de repartidor, 3 de panadero, algun trabajo fuera de la ley, etc). La semana anterior perdía el último. Ya tenia una decisión.
Esa noche invitó a cenar a Marion, una de las pocas amigas que habia conseguido mantener en esos años, él sabia que ella estaba enamorada, pero ninguno dijo nada y la amistad fue creciendo hasta establecerse.
"Ya tengo el billete comprado, no me discutas más porque me voy a ir, mi vida debe ser normal, vine aquí hace años, he vivido lo que he querido como he querido. Soy feliz, solo quiero ser normal."
"Nino, vous n'avez jamais été ni ne sera normale"



L'histoire n'est pas finie...

Noche sin fósforos

Porque a ella, en el fondo, le gustaba venderlos. Le gustaba, le gustaba...sin duda, le gustaba.

Lo repetia a todas horas durante la noche, era su forma de alejar el frío de su cuerpo y, preferentemente, de su cabeza. Dejaba esos pensamientos a parte cuando alguien se le acercaba pidiendole una caja, ella era discreta y  siempre esperaba a que vinieran, pero aun así, alguna que otra vez le habia puesto valentia y habia anunciado lo que vendia a los que iban, venian, volvian o buscaban.
Noa venia del norte, allí la llamaban Ainhoa, aquí, nadie la llama por su nombre.
"Me gusta, me gusta venderlos, me gusta" seguia reprochandose. Efectivamente, ya no eran pensamientos de autoconsuelo, era un enfado propio. Aunque, como le dijo una antigua compañera de trabajo, todo eso se resume en decisiones. "Nunca, cielo escuchame bien, nunca sabras si ha sido la elección correcta. Hay gente que lo llama efecto mariposa, otra gente habla de karma, muchos dicen que el destino esta escrito. Pasa de todo, intenta ser lo más positiva que puedas, y sigue vendiendo cerillas, que de algo tienes que vivir hasta que ese algo, llamalo X, decida que tu vida debe cambiar".
Paró de pensar y decidió irse a su piso compartido, hacía frío, y con lo que habia vendido podia permitirse cerrar el negocio esa noche.
De vuelta a casa

To be continued, pero recuerda, esto no es un cuento para niños.

Sin borrones...Cuenta nueva.

Estaba yo sentado en la típica silla giratoria de escritorio, delante del ordenador teniendo una conversación insustancial a la par que entretenida con una amiga, cuando me he acordado de mi viejo blog...mi Blog Madrileño.
He entrado y he leído las pocas entradas que escribí, y me ha hecho gracia lo que he visto, lo pequeño que me veo, y la perspectiva que tenia hace tan solo un año.
Entonces, como no, a mi mente ha venido el mundo de reflexiones sobre el tiempo, los cambios, el mundo que me rodea y yo.
Durante este año sin actualizar ni visitar este sitio, me ha pasado de todo, cosas que contar, cosas que escribir, cosas que escuchar y cosas que guardar. Tengo que admitir que no me arrepiento de no haber hecho una locura y haberme quedado en la capital (aunque claro, nunca se sabe donde estaria ahora si hubiera seguido aquel camino).
Estoy pensando... en retomarlo, escribir sobre mi presente no me vendrá mal.
Un saludo, y buenas noches damas y caballeros.

P.D: Dejo una canción que define mi estado actual:
http://www.youtube.com/watch?v=KyqbISKd2nk